Hijo de inmigrantes europeos, el Dr. Jacobo Grinberg-Zylberbaum nació en la Ciudad de México en 1946. Creció en los jardines del Parque México y cursó sus estudios básicos en escuelas de tradición judía. A la edad de doce años pierde a su madre de un mal cerebral y en ese momento, Jacobo decide dedicarse a estudiar la mente humana.
Cursó la Licenciatura de Psicología en la Facultad de Ciencias de la UNAM y en 1968 fundó el Laboratorio de Psicofisiología de la Universidad Anáhuac.
Estudió a los chamanes mexicanos, disciplinas orientales y meditación, integrando todo ésto a su práctica profesional.
En sus laboratorios participó en investigaciones que se dedicaban a registrar la actividad cerebral de animales durante el aprendizaje, por lo que el New York Medical College lo aceptó para realizar un doctorado en el laboratorio de E. Roy John, que incluía el registro electrofisiológico del cerebro humano durante procesos de asignación de significado a estímulos geométricos, en 1976.
Al volver a México, imparte clases en la UNAM instalándose en Tepoztlán, donde comienza a escribir, logrando publicar 54 libros.
Jacobo Grinberg fundó el Instituto Nacional para el Estudio de la Conciencia, que recibió fondos de la UNAM y Conacyt, y con cuyo sello editó gran parte de sus libros.
Cuando regresó a México, en 1988,después de cursar su doctorado en New York, Grinberg arriesgó su prestigio académico al publicar un libro sobre Bárbara Guerrero, curandera mexicana mejor conocida como Pachita, que supuestamente entraba en trance para ser poseída por el espíritu de Cuauhtémoc y realizaba complejas operaciones quirúrgicas con un cuchillo oxidado. Participó en las operaciones de Pachita quién según afirmó, lo hizo comprender que la aparición de la conciencia a partir de la actividad cerebral era una pregunta que la fisiología contemporánea no estaba preparada para contestar con experimentos como los que realizaban él y sus colegas en los laboratorios. Esto le ocasionó a Jacobo tiene una época difícil con sus colegas científicos; sin embargo su perseverancia lo lleva a inaugurar el Laboratorio de Comunicación Humana en Ciudad Universitaria.
Grinberg publicó quizá su mejor libro sobre esta experiencia y, como la mayoría de sus obras, se encuentra agotada.
Grinberg profundizó en las técnicas energéticas de los estados meditativos y sugiere que recibió propuestas de agencias militares estadounidenses. Cuando Jacobo Grinberg desapareció, trabajaba entrenando niños con la dermo-óptica, que es la capacidad desarrollada en los pulpejos de los dedos para leer.
En diciembre de 1994, el Dr. Jacobo Grinberg-Zylberbaum, profesor de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México, desapareció misteriosamente en el cerro del Tepozteco dando lugar a todo tipo de especulaciones basadas en extravagantes teorías conspirativas. Hay quienes se atreven a culpar a allegados a Carlos Castañeda, el misterioso autor de “Las enseñanzas de don Juan” y de otros textos sobre brujos yaquis. Algunos aseveran que fue secuestrado por agentes del gobierno estadounidense porque éste quería aprovechar descubrimientos del investigador referentes a la modificación del espacio-tiempo a través del poder de la mente. Otros más, aseguran que el doctor rompió voluntariamente sus vínculos sociales una vez que alcanzó el máximo nivel de conciencia y desarrollo espiritual y otros mas que fué secuestrado por agentes rusos de la KGB.
En sus estudios demostraba científicamente que existía la comunicación telepática. En uno de sus múltiples experimentos, ponía a dos personas en cámaras aisladas y ambas personas podían comunicarse y presentar el mismo trazo de actividad cerebral.
En las ultimas investigaciones que estaba realizando, el Dr. Grinberg estaba comparando el estudio del funcionamiento del cerebro en personas normales y chamanes, personas dedicadas a la curación a base de limpias y pases de mano. En ese entonces el descubrió que las formas de funcionamiento de un cerebro normal y un cerebro de un chamán eran diferentes.
Para realizar ese estudio empleó técnicas muy avanzadas que permiten conocer cuando llega la información al cerebro, como este la está procesando, cuales son las áreas extractivas que activan las áreas del cerebro del hemisferio derecho o del izquierdo y como interactúa esa información o las neuronas, logrando demostrar que una persona normal ante cualquier evento ocupa ciertas partes del cerebro y los chamanes ocupan áreas muy amplias y de ambos hemisferios. Esto lo hizo llegar a la conclusión de que ya se nace para chamán.
El Dr. Grinberg se basaba en una teoría que el llamaba Sintérgica y que su postulación fundamental es la que surge como resultado de tres procesos de interacción. El primero de ellos es una interacción entre elementos neuronales capaz de crear un campo energético complejo denominado Campo Neuronal.
La Segunda interacción ocurre cuando el campo neuronal se pone en contacto con la estructura energética del espacio. La interacción entre el campo neural y el espacio crea un patrón de interferencia que se denomina estructura energética de la experiencia. El tercer proceso de interacción ocurre entre la estructura energética de la experiencia y un proceso central. Esta interacción es la más misteriosa de todas e implica la existencia de una focalización energética realizada a través de un hipotético factor de direccionalidad.
De acuerdo con la teoría Sintérgica, cualquier ser vivo, con la capacidad de experimentar o de sentir, sufre de los tres procesos de interacción. Obviamente los niveles de experiencia de cada ser dependen de la complejidad de su campo neuronal y esta, a su vez, de la complejidad del cerebro del cual surge el campo. De acuerdo a las observaciones de Jacobo Grinberg, un chaman es capaz de ejercer una interacción poderosa y directa con el espacio y sus campos de información.
